No importa lo que pase; lo escalofriante o lo maravilloso que sea un acontecimiento, que le ocurra a una sola persona o a millones de ellas, el ruido que haga, el silencio que deje, las lágrimas o las sonrisas que nos cueste. Porque todo sin excepción seguirá el curso del tiempo, y empiezo a creer que sus aguas son capaces de arrastrarlo todo, o al menos sí de erosionarlo.
¿Triste? Bueno... lo dudo. No siempre es triste olvidar. Y nunca lo es recibir las cosas nuevas, ya buenas o malas, si nos empeñamos, como buenos seres humanos que somos, en clasificarlas de ese modo. Simplemente es así. Y seguramente lo sea por algo.
Una por otra. Día tras día.
Aunque sea conveniente tener presente también el pasado [ :) ], la vida es demasiado emocionante como para pasársela contemplando huellas.
Un disgusto, una carcajada.
Y tengo que decir que a lo largo del día son muchas, muchísimas más las carcajadas que los disgustos.
Hace un par de días me desperté a mí misma riéndome en sueños.
Y la vida siempre, siempre continúa.
<< The sands of time were eroded by the river of constant change >> (Genesis, Firth of Fifth)
1 comentario:
Foto propia; río Verdouble, Pirineos Orientales, Francia (Julio del 2011)
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